La publicación de datos abiertos (el famoso “open data”) está de moda. Día a día, nos llegan noticias de nuevos datos que se liberan y de nuevas iniciativas alrededor de los datos abiertos tanto a nivel municipal, regional y nacional. Por ejemplo, podéis ver el portal de datos abiertos de la ciudad de Barcelona, el catálogo catalán o el español. Para que os hagáis una idea de los volúmenes de los que hablamos, el portal español registra más de 20.000 recursos de datos abiertos mientras que el portal de open data Europeo, que agrega todas las iniciativas de datos abiertos en Europa, enlaza a más de 400.000.
No hay duda que los datos abiertos han sido un gran paso adelante para la administración pública, a todos los niveles.
Pero, ¿cuál es el impacto real de todas estos iniciativas para el ciudadano de a pie?. En mi opinión, muy poco. Desde un punto de vista técnico, todas las iniciativas mencionadas anteriormente se pueden calificar de datos abiertos ya que la información que contienen está a disposición de cualquiera que quiera mirarla, de una forma totalmente gratuita. Pero como contamos en este post: El gran problema de los datos abiertos, el querer no siempre es poder. Los ciudadanos que no tengan conocimientos técnicos se encontrarán con un buen número de dificultades a la hora de acceder y consultar estos datos. Entre ellos, la variedad de los formatos (CSV, XML, APIs) y la compartimentalización de los mismos.
Lo que necesitamos es una interfaz amigable y fácil de usar que permita a usuarios no técnicos el acceso y consulta de todos los datos abiertos puestos a disposición de los ciudadanos por parte de las administraciones públicas. Lo contrario es tirar el dinero (o dejar que sólo se beneficien de él, las empresas que puedan construir algún tipo de modelo de negocio basado en la explotación y el cocinado de esos datos para luego “venderlos” a los ciudadanos interesados; éste es un modelo muy válido y que puede dar un importante valor añadido pero no debería ser la única manera que tenga un ciudadano de a pie para acceder a los datos públicos).
Creemos que los chatbots son la interfaz perfecta para los datos abiertos. Al ser, por definición, una interfaz conversacional, no imponen ningún tipo de barrera de entrada que excluya a parte de la población. Los chatbots son el complemento perfecto al proyecto “Open Data for All” donde trabajamos en la parte del back-end para facilitar la combinación de datos abiertos que permita ofrecer al ciudadano recursos de datos más ricos y completos.
La figura siguiente muestra un ejemplo de bot (nosotros usamos la plataforma de software libre Xatkit para crear estos bots) para preguntar sobre apartamentos de alquiler que estén cerca de una estación carga de coches eléctricos y de una estación de bicing (los logos en la figura representan las APIs individuales, cada uno capaz de responder a una parte de la pregunta). La pregunta inicial del ciudadano (en lenguaje natural) es comprendida por el chatbot quien la pasa al modelo de datos unificados que se encarga de preguntar a cada API la parte que le corresponde para luego combinar los datos y pasar la respuesta al chatbot quién se la explica al ciudadano.
Las interfaces conversacionales son el futuro de la interacción con la administración pública. Pero tampoco es todo tan fácil como meter un chatbot en cada portal ciudadano. Los chatbots actuales están muy orientados a responder preguntas descriptivas , es decir a proporcionar hechos y datos concretos. Pero las preguntas habituales cuando los datos son económicos o sociales muchas veces son de tipo diagnóstico o predictivo e incluso a veces de tipo prescriptivo (ver la distinción el siguiente gráfico). Todas ellas requieren que los chatbots entienda preguntas con operadores estadísticos y matemáticos (e.j. ¿cuál es el valor medio de los apartamentos? ¿cuánto más caros son los apartamentos que están cerca de una estación de carga vs aquellos que no lo están?, ¿están subiendo de precio?).
En Xatkit y en SOM estamos explorando todos estos temas. Así que si te interesan los temas de los chatbots, la administración pública y los datos abiertos no dudes en ponerte en contacto con nosotros.