Paso a paso, las nuevas tecnologías se hacen un hueco en todos los sectores. Big data, inteligencia artificial y aprendizaje automático se aplican cada vez más en el día a día de las empresas, convirtiéndose en los responsables del imparable éxito del comercio de todo el mundo, incluyendo nuestro país.
Pero, ¿cómo hemos llegado a esa realidad?Gracias a la huella digital, podemos saber que hemos generado en torno a un 90% de datos a lo largo de estos últimos 5 años. Datos que podemos utilizar para decidir la mejor forma de conseguir la fidelidad con el cliente, mejorar la experiencia de compra, optimar productos… A fin de cuentas, obtener una gestión de los recursos más eficiente.
El tiempo nos ha traído una serie de tendencias y las ventajas de implantarlas en los modelos de negocios de cientos de empresas. Podemos destacar 8 claves para ayudar a los comercios minoristas a crecer gracias a la inteligencia artificial:
- Hiperpersonalización: entender lo que el cliente necesita, más que importante, es imprescindible. De esta forma, podemos llegar a darles soluciones claras y precisas para su demanda.
- Optimización logística: gracias a la inteligencia artificial, es posible adelantarse a las necesidades de los clientes, de modo que puede gestionar la existencia de productos y por ende, ajustar el almacenamiento de los productos de manera efectiva.
- Omnicanalidad: para conseguir que el usuario se sienta único, será necesario un pequeño cambio con respecto al modelo anterior a internet. Una unión entre todos los canales con el objetivo de atender al cliente cuándo, dónde y cómo necesita. Estamos ante la combinación de los online y los físico.
- Interfaces visuales: ya sabemos que los asistentes de voz causan furor, y no pasará mucho tiempo hasta que los utilicemos para todo, incluido comprar. Y gracias a esta nueva ventana, las empresas podrán interactuar con los clientes como si estuvieran cara a cara, de persona a persona. De dependiente a cliente.
- Ubicación óptima: gracias a todos los datos que podemos reunir al realizar ciertos procesos, los empresarios podrán predecir cuál sería el mejor lugar donde ubicar la tienda. Podemos saber la cantidad de gente que pasa por cierta calle, las horas, el tipo…algo que, sin duda, tiene un gran valor para los dueños de estas tiendas. Una forma de estar cerca de su clientela sin que ellos lo sepan.
- Dotación de personal: al conocer cuándo cierta calle en la que se encuentra el local está más concurrida, el dueño podrá ajustar los horarios de sus trabajadores de forma precisa. Más trabajadores para cuando haya más gente, menos para cuando apenas haya clientes.
- Dotación de personal: hay muchas formas de mejorar la experiencia del cliente (ya sea por asesoramiento, formación, upgrading…). Así que, ¿por qué no ofrecer eso? Cambiar la fabricación única por un servicio basado en la confianza y la experiencia.
- Tiempo de entrega: como ya hemos dicho antes, si podemos predecir las necesidades del cliente, podemos adelantar procesos. Esta realidad nos permitirá una distribución más eficiente, tardar menos en entregar los pedidos.
Como puedes comprobar, la aplicabilidad de la Inteligencia Artificial se resume en muchas ocasiones en una mejora de la eficiencia. Y es que es una de las claves para conseguir el éxito en este mundo digital. Si una empresa consigue hacerse con estas 8 claves, su negocio subirá como la espuma. La eficacia es la mejor amiga de las PYMES.
Tras la inteligencia artificial, eso sí.