Conocemos un gran número de asistentes virtuales pero, ¿sabrías decir cuántas de sus voces son masculinas?
Exacto, apenas un par de ejemplos tienen voz masculina (como Google Assistant) pero por lo demás, la voz predominante es la femenina, ¿por qué?
La agencia Tango ha denunciado este fenómeno en colaboración con AHIGE (Asociación de Hombres por la Igualdad de Género) y la Confederación de Mujeres por la Igualdad. Creando para ello la campaña “Voces por la Igualdad”. El principal objetivo de esta campaña es concienciar al mundo de la segregación por géneros que aún se vive a día de hoy, incluso en tecnologías tan novedosas como los asistentes de voz. Con este objetivo en mente se reivindica el hecho de que casi todos los asistentes de voz tienen voz de mujer, incluidos los servicios públicos de Renfe y Correos (Irene y Sara respectivamente).
Quienes crearon esta campaña declaran que:
“A veces los estereotipos de género están tan instaurados en nuestra cotidianidad que pasan desapercibidos”
Y esto es muy cierto, porque ¿cuántas veces nos hemos parado a pensar en este fenómeno? Desde Siri a Cortana, pasando por Aura y la popular Alexa. Todos tienen voz de mujer de forma preestablecida, aunque bien cierto es que esto puede cambiarse a gusto del usuario, todo sea dicho.
¿La razón por la que la mayor parte de las voces son de mujer? Los impulsores de este movimiento lo explican con el siguiente razonamiento sacado de varios estudios cuyo objeto son los usuarios de estos asistentes virtuales:
“Es resultado de diversos estudios que dicen que los usuarios de todos los géneros prefieren interactuar con mujeres, ya que la voz femenina es percibida como más servicial, en lugar de con voces masculinas, asociadas a la autoridad”.
Debido a los resultados de estos estudios, los miembros de la campaña denuncian que esto produce que la brecha que hay entre hombres y mujeres sea más difícil de superar en las sociedades modernas. Una vez creado el estereotipo basado en el género, es más complicado erradicarlo del pensamiento social, llegando a la premisa de que mientras los hombres mandan, las mujeres deben obedecer.
Pero no todo está perdido, pues comienza a haber una concienciación sobre esto, hasta tal punto que la firma nórdica Virtue unida a Copehagen Pride han creado Q. La novedad de este asistente de voz es que se trata del primero que no tiene un género de voz definido. Su voz es totalmente neutra siendo imposible caracterizarla como masculina o femenina.
Gracias a un software que llega a los 145 Hz, consiguen ocultar el género de las voces originales. Tras diversas pruebas donde voluntarios (entorno a 4600) debían definir la voz como femenina o masculina, al fin se llegó al punto neutral. Los creadores de este nuevo asistente promueven que las grandes compañías que ya cuentan con sus propios asistentes (Amazon, Apple, Google…) implementen a Q como tercera alternativa. Ya no tendríamos que elegir entre voz masculina o femenina. Ahora entra en la balanza la neutral.
Poco a poco, las tecnologías auguran un futuro igualitario para todos, y este es solo el primer paso. Un paso más hacia la igualdad.